Con el proyecto del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), antecesor del TMEC, que se firmó en diciembre de 1992 y entró en vigor hacia el año de 1994, se creía que México iba a formar parte de los países del primer mundo, como Estados Unidos y Canadá, quienes también firmaron el documento, pero esto no fue así, ¿por qué? Te decimos.
Una de las primeras consideraciones para tener en cuenta es: ¿qué es un país de primer mundo? Estos se definen como las naciones más desarrolladas, tienen un nivel y calidad de vida superior al resto de los territorios gracias a su alta riqueza y la distribución de la misma, de acuerdo con Econopedia.
Pero también se suele considerar la riqueza de otros aspectos de la población, como la esperanza de vida al nacer y la alfabetización, los cuales mide el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) de la ONU mediante su Índice de Desarrollo Humano (IDH).
De acuerdo al IDH presentado en el 2020, México se encuentra en el lugar 76 de 189 países con un índice de 0.779, lejos de Noruega, que ostenta el primer lugar con 0.957, o de Canadá y Estados Unidos, que tienen 0.929 y 0.926, respectivamente.
El IDH se calcula con los datos de la esperanza de vida, que en México es de 75 años, la escolaridad (10 años en promedio en el país) y la renta per cápita de cada país.
¿México estuvo a punto de formar parte del primer mundo?
La interacción comercial entre los tres países que firmaron el TLCAN no aportó el incrementó deseado en los niveles de vida y bienestar de los mexicanos, considera Alain Rouquié, Director de investigación emérito de la Fundación Nacional de Ciencias Sociales, en su artículo México y el TLCAN, veinte años después (2015).
"México no consiguió realizar en dos decenios el gran salto hacia adelante que habían sabido hacer, en Asia, Corea del Sur y Taiwán", precisa Rouquié, Presidente de la Casa de América Latina en Francia.
Y es que se esperaba que con la participación de México en el tratado, así como con su adhesión a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el país pudiera formar parte del primer mundo, lo cual no se obtuvo.
Aunque lo que sí se logró fue un incremento en las exportaciones, pues para el 2009 la nación mexicana logró ocupar el número 12 a nivel mundial en ese rubro.
Si bien en el artículo se refiere que más del 80 por ciento de las ventas de México son de productos manufacturados, esto ha permitido a los críticos del Tratado señalar que la economía se basa en la subcontratación que mantiene bajos salarios.
A esto se añade que el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) señaló que México ocupó el lugar 37 de 43 en su Índice de Competitividad Internacional 2021, el cual mide la capacidad de los países de generar, atraer y retener talento e inversión.
Por otro lado, México pasó a tener un Índice de Desarrollo Humano, uno de los parámetros con los que se consideran a los países del primer mundo, de 0.656 en 1990 a 0.779 en 2019, un incremento del 18.8 por ciento, donde destaca que el Índice Nacional Bruto per cápita aumentó aproximadamente 32.1 por ciento en ese mismo periodo.