El español Banco Santander se queda sin opciones de pujar por Banamex, la filial de Citigroup en México, por la que se interesó y llegó a presentar una primera oferta no vinculante que fue rechazada, lo que le deja fuera del proceso de venta, según informó este viernes al supervisor bursátil español.
El grupo bancario confirma que presentó una oferta no vinculante, dado su interés por participar en el proceso de venta con el que Citigroup podría desprenderse de algunos negocios de su operativa en México, que el vendedor consideró.
Sin embargo, al Santander ya se le ha trasladado que no continuará en las siguientes etapas del proceso, lo que le deja sin opciones de pujar por Banamex.
"En relación con la potencial venta de ciertos negocios de su operativa (de Citigroup) en México, Santander confirma que presentó una oferta no vinculante y que, tras haber sido sometida a la consideración de Citigroup, el Banco ha sido informado de que no continuará en las siguientes etapas del proceso", dijo el banco en un comunicado el viernes.
En una consulta realizada por Grupo Fórmula, el banco Santander precisó que Citibanamex rechazó su oferta en el proceso de compra-venta.
La presidenta del banco español, Ana Botín, avanzó a principios de febrero que el Santander participaría en el proceso de venta de Banamex y llegó incluso a descartar que para llevar a cabo la compra tuvieran que apelar al mercado.
En la misma fecha, el presidente del también banco español BBVA, Carlos Torres, dio por hecho que esta entidad estudiaría la posibilidad de hacerse con Banamex, aunque eso no se tradujera necesariamente en participar en el proceso.
Pero más allá de los bancos españoles, Banamex ya había suscitado el interés de Banorte, de Banca Mifel, del empresario minero mexicano Germán Larrea y más tarde también del magnate mexicano Carlos Slim, que a través de su banco, Inbursa, estudiaría presentar una oferta junto a otros inversores.
En distintas ocasiones, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, mostró su preferencia por que las empresas del país, como Banamex, sigan en manos de inversores locales.