Desde antes de que salga el sol en las calles de Ciudad de México (CDMX) ya transitan miles de personas que salieron de casa a primera hora para llegar a tiempo a la escuela o el trabajo. Al igual que ellos hay otros que desde temprano caminan apresurados pero con un destino diferente: la lechería Liconsa.
Armados con cubeta en mano –misma que primero sirvió para llevar pozole, pancita, agua, etc.- se puede ver a madres, padres, adultos mayores, e incluso a niños, niñas y adolescentes llegando a una de las 552 lecherías que hay actualmente en la capital desde las 6:00 de la mañana.
Tal es el caso de Sonia, madre de dos pequeños que actualmente estudian la primaria y quien cada lunes y viernes se despierta a las 5:30 de la mañana para ir a comprar lo que será el desayuno de su familia.
Para ella, poder comprar una bolsa con dos litros de leche en tan sólo 11 pesos es una gran ayuda a su bolsillo, sobre todo “para darle de comer a dos niños que están creciendo y comen como si lo merecieran”, dijo. Ello en comparación con el precio de la leche de otras marcas, que en tiendas cuesta alrededor de 20 pesos en el mejor de los casos.
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Hace varios años Sonia tendría que haber llegado a la lechería Liconsa antes de las 5:00 de la mañana para tratar de ser una de las primeras personas en la fila y que la leche no se acabara antes de que llegue su turno.
Afortunadamente esto ya no es así, pero aunque ya no sea necesario formarse hasta una hora antes de abrir, aún debe levantarse antes de que saga el sol para llegar a tiempo a la lechería.
Así funciona una lechería Liconsa
Poco después de las 5:00 de la mañana Doña Gloria llega a la lechería Liconsa ubicada en la colonia Unidad Preconcreto de la alcaldía Álvaro Obregón lista para recibir la leche que se venderá ese día.
Esta sucursal recibe en promedio 390 litros de leche cada mañana, cantidad suficiente para abastecer a un promedio de 90 beneficiarios diarios. A cada uno se le entregan dos bolsas de leche de dos litros cada una (cuatro litros en total), explicó a Grupo Fórmula Digital.
Esta mujer de la tercera edad funge desde hace un par de años –no recuerda exactamente cuántos- como voluntaria encargada de verificar la asistencia de los beneficiarios y que se lleven los litros que les corresponden.
A las 6:00 de la mañana se abren las puertas de la lechería y comienzan a llegar las primeras personas con cubeta y tarjeta en mano, misma que certifica que cumplen con los requisitos para poder comprar leche Liconsa.
Aunque hace años las personas debían llegar hasta una hora antes de que abriera para formarse, actualmente esto ya no es necesario gracias a que a cada persona se le asigna un día y horario específico para ir por los litros que le corresponden.
La asignación de estos turnos es determinada por cada lechería y depende principalmente de la disponibilidad que hay.
Sin embargo, aunque los encargados de la lechería han tratado de garantizar que todos los beneficiarios alcancen leche, hay días en los que las bolsas no son suficientes y algunos se quedan sin desayuno, contó la señora Gloria.
Minutos después de que abrió la lechería Sonia llegó lista con su cubeta, entregó su tarjeta a Doña Gloria para que la marcara, tomó las dos bolsas de leche que le corresponden y se fue de prisa para darle de desayunar a sus hijos antes de llevarlos a la escuela.
¿Quiénes pueden comprar en lecherías Liconsa?
Debido a que el Programa de Abasto Social de Leche a cargo de Liconsa tiene como objetivo beneficiar a quienes viven en condiciones de pobreza extrema o que pertenezcan a grupos vulnerables, sólo ciertas personas pueden comprar en estas lecherías.
Para que una persona pueda ser beneficiaria de este programa debe cumplir con alguna de las siguientes condiciones:
- Ser niña, niño o adolescente de 6 a 15 años de edad.
- Ser mujer en periodo de gestación o lactancia.
- Ser mujer mayor de 45 años de edad.
- Ser una persona mayor de 60 años de edad.
- Padecer una enfermedad crónica o vivir con alguna discapacidad
Aquellas personas que cumplan con alguna de estas condiciones y deseen comprar en lecherías Liconsa pueden acudir a la unidad más cercana a su domicilio para solicitar su registro en el padrón de beneficiarios.
Cada persona que sea aceptada tiene derecho a comprar dos bolsas de leche de dos litros en 11 pesos cada una (5.50 pesos el litro) una vez a la semana.
En el caso de los hogares en los que viven más de un beneficiario recibirán los mismos cuatro litros de leche por cada uno; por ejemplo, una familia con dos hijos menores de 15 años tendrá dos beneficiarios, con lo que podrá comprar ocho litros de leche a la semana (cuatro por cada uno).
El pasado viernes 30 de septiembre el gobierno de la CDMX anunció que gracias a un convenio con Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) entre octubre y diciembre de este 2022 abrirán un total de 135 nuevas unidades de Liconsa en la capital, con lo que buscan que todas las colonias de bajo y muy bajo desarrollo social cuenten con una lechería a menos de un kilómetro de distancia.