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Ni el mar ni la soledad me dan miedo: Abraham Levy. Con José Cárdenas

El explorador mexicano dijo que llegará a Cancún el 14 de marzo después de haber atravesado el Atlántico: “me encuentro muy tranquilo, y la noche la disfruto aunque esté completamente oscuro, y es cuando disfruto la soledad, de vez en cuando sí me hubiera gustado compartir momentos importantes como esos cielos estrellados y amaneceres, que alguien más experimentara esa sensación”.

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A 100 días de estar en altamar remando en el Atlántico, el explorador mexicano Abraham Levy dijo que el mar ni la soledad le dan miedo sino los animales de dos patas que son los más peligrosos. En entrevista con José Cárdenas, el deportista comentó "me encuentro muy tranquilo, las noches las disfruto aunque esté completamente oscuro, y es cuando disfruto la soledad, de vez en cuando sí me hubiera gustado compartir momentos importantes como esos cielos estrellados y amaneceres, que alguien más experimentara esa sensación”. Comentó que este lunes por la mañana salió de una fuerte corriente que lo empujó al sur, obligándolo a pasar por un banco misterioso perteneciente a las Islas Caimán, pero ahora la corriente del Canal de Yucatán le ha permitido acercarse a Cancún, a buena velocidad por lo que su pronóstico es llegar a México el 14 de marzo al mediodía. El explorador resaltó que salió de España autopropulsado en una embarcación denominada "Cascarita", el 21 de octubre, haciendo dos paradas técnicas, una en las Islas Canarias y la otra en el Caribe, en la isla La Antigua. Indicó que se encuentra en buena condición, ya que ha sido desgastante estar remando en una gran inmensidad, donde uno se siente un granito de arena, pero "yo me propuse un reto que fue recorrer una ruta entre España y Cancún a remo y en solitario, sin utilizar motor, ni vela y yo llevo mi día número 100 en mi embarcación que fue diseñada para poder hacer esta travesía”. Mencionó que en la tarde de este lunes se encontró a 200 millas de Cancún, o sea a 400 kilómetros y que, viendo el mapa de lo que ha recorrido, le ha costado trabajo creer que haya navegado solo el Atlántico y a remo. Explicó que ha utilizado mucha estrategia de las corrientes y vientos predominantes, además cuenta con el apoyo de un equipo de meteorólogos de Nueva York, que continuamente lo asesoran vía satélite, a fin de evitar las tormentas, "pero me tocó una muy fuerte en Navidad que mi embarcación llegó a voltearse completamente que me atemorizó”. Mencionó que trae comida deshidrata que pesa poco para seis meses, y para el agua ha utilizado un sistema de salinización, portando para ello dos aparados, uno que funciona con energía solar y otro manual. Expresó que rema 10 horas al día, horas que distribuye de acuerdo a las condiciones climáticas y, en zonas como el Caribe, se ha resguardado por el intenso calor y aprovecha para comer, ajustar su equipo y dormir. Pero cuando navegó en el norte, saliendo de España utilizó los momentos de mayor calor para remar porque el frío era intenso. Mencionó que le gusta mucho la naturaleza, estar en el mar, en la montaña y recordó que ha pasado mucho tiempo solo, pues en 2007 realizó una expedición en toda la costa de México donde recorrió 11 mil 500 kilómetros, por lo que ya está acostumbrado a la soledad. Señaló que tiene una mascota llamada Manchas, un tiburón ballena que le gusta ir a Cancún una vez al año, además es apoyado por un grupo de patrocinadores, entre ellos el gobierno de Quintana Roo, Gatorade, además de que apoya la protección para la conservación del arrecife mesoamericano que es la segunda zona de arrecifes del mundo. Por último dijo que seguirá twitteando en vivo vía satélite. jgr