Ya te hablamos de los apellidos menos comunes que existen en México, entre los cuales destacan apellidos franceses de personas que son descendientes de algún habitante de dicho país europeo.
En otros casos, hay individuos de aquél territorio que decidieron residir en la República Mexicana en años recientes y por eso tienen nombres que resultan poco usuales en tierra azteca.
Pero para el caso de mexicanos y mexicanas que nacieron aquí pero cuentan con una denominación gala, ¿será que pueden solicitar su nacionalidad?
¿Cuáles son los apellidos franceses en México?
En la época del Porfiriato, que abarcó de 1877 a 1880 y de 1884 a 1911, nuestra nación presenció la llegada de migrantes ingleses, franceses y alemanes que se asentaron en diversos puntos.
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Respecto a los ciudadanos de Francia, se sabe que se establecieron en entidades como Guanajuato, Jalisco, San Luis Potosí y Veracruz.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), los apellidos franceses más comunes en la República Mexicana son los siguientes:
- Monroy
- Meyer
- Derbez
- Betancourt
- Ebrard
- Martin
- Limantour
- Michel
- Bernard
- Mayer
- Durand
- Laurent
- Robert
- Simon
- Castel
¿Se puede obtener la nacionalidad francesa por el apellido?
Si tienes alguno de estos apellidos franceses en tu acta de nacimiento y te preguntas si puedes solicitar la nacionalidad francesa, la respuesta es que NO te la darán porque hay otro tipo de requerimientos oficiales para lograr tal cometido.
¿Cómo se puede obtener la nacionalidad francesa?
De acuerdo con la Embajada de Francia en México, para acceder a este beneficio una persona debe nacer en Francia. También aplica para quienes nacen en aquél sitio y tienen un padre o madre de origen francés.
Otra alternativa se aplica a los niños nacidos de padres extranjeros: “Todo niño nacido en Francia de padres extranjeros adquiere la nacionalidad francesa a la mayoría de edad, si en ese momento, vive en Francia y si ha tenido residencia permanente en Francia por un periodo (continuo o discontinuo) de cinco años, desde los once años de edad”, se indica en el portal del consulado galo.
Se otorga el beneficio a quienes forman un matrimonio con una persona de origen francés. Por naturalización, sólo se da a aquellas personas que comprueben su residencia en Francia por un periodo de 5 años.
“La naturalización solo se puede conceder al extranjero que demuestre una residencia permanente en Francia durante 5 años anteriores a la solicitud, exceptuando algunos casos de disminución o eliminación de dicho plazo determinados por el código civil. Además, el extranjero debe tener su residencia en Francia en el momento de la firma del decreto. La solicitud debe entregarse en la prefectura competente”, se precisa en el portal web.
Así que ya sabes la respuesta: si tienes apellidos franceses no te darán la nacionalidad francesa, a menos que tus padres sean originarios de aquel país y que tú acumules un tiempo de residencia en dicha nación.
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