Una de las historias más conmovedoras del Cine de Oro es la del actor que dejó todo su éxito y reconocimiento, para terminar cuidando enfermos de lepra.
Hay relatos tristes de las estrellas que formaron parte de esta ola artística, como la forma en la que Pedro Armendáriz se quitó la vida tras participar en una ‘película maldita’.
Esa narración ya la compartimos contigo, por eso mejor volvamos al relato sobre el histrión que se dedicó a ayudar a los demás como parte de su cambio de carrera.
Nos referimos a Humberto Almazán, quien nació en la Ciudad de México un 16 de febrero de 1924. En un primer momento él decidió estudiar Arquitectura en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
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No obstante, por falta de motivación, abandonó esa licenciatura para entrar a la escuela de Teatro a mediados de la década de los 40.
Debido a su talento debutó en la cinta ‘Corazones de México’ (1945), de Roberto Gavaldón. Luego de eso vinieron otros proyectos como ‘El joven Juárez’ (1954), ‘El río y la muerte’ (1954), ‘Así era Pancho Villa’ (1957).
Aunque su trayectoria iba ‘viento en popa’, el actor del Cine de Oro tuvo que salir de México porque su esposa sufrió complicaciones en el embarazo. Desafortunadamente, ella murió.
Para soportar la pena, Humberto Almazán se mudó a Italia y siguió estudiando actuación. Su regreso a Tierra Azteca se dio a inicios de los años 60.
¿Qué fue de Humberto Almazán?
Pese a que tenía un don natural para desempeñarse como actor, él sentía que su camino podía estar en otro lado y decidió convertirse en sacerdote.
“En 1962 el actor tomó una decisión radical. Fue hasta Perú a tomar un descanso religioso en un monasterio. Era común en él tomar sabáticos espirituales, por lo que creció su interés en la vida religiosa y se volcó totalmente al estudio de la teología”, se refirió en el canal de YouTube Cine Dorado MX.
Para 1966 se ordenó como religioso en la Orden de los Santos Apóstoles, debido a lo cual realizó misiones en países como Italia, España y Francia. Además, dedicó gran parte de su tiempo a cuidar de enfermos de lepra.
“Pidió a sus superiores poder irse de misionero a la lejana isla de Bali, situada en Indonesia, donde se hizo cargo de 700 enfermos de lepra”, se explicó en el video de Cine Dorado MX.
Luego de convertirse en cura, Humberto Almazán volvió al cine en 1969. Para su regreso interpretó a un sacerdote católico en la cinta ‘The Challenge’. También participó en los proyectos ‘La trenza sagrada’ (1975) y ‘La hiena humana’ (1995).
El actor del Cine de Oro no sólo cuidó de enfermos de lepra, también atendió a bebés infectados con VIH. Actualmente tiene 99 años y vive en España.
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