En el Cine de Oro no todo fue glamour, tal es el caso que ya te hablamos del actor que gastó su fortuna entera por apoyar a una joven y terminó en el olvido.
Una situación similar le ocurrió a Joaquín Vargas García, el comediante que es mejor conocido como ‘El Borolas’ y quien saltó de ‘Las Carpas’ a realizar interpretaciones en la época dorada de la cinematografía nacional.
El humorista nació en Michoacán en 1922 y, tras realizar varios trabajos para sobrevivir, se mudó a la Ciudad de México y se adentró al mundo de la actuación.
Fue en 1949 cuando llegó su oportunidad de debutar en el séptimo arte, pues el histrión lituano Estanislao Schillinsky Bachanska lo ayudó a quedarse con un personaje secundario en la cinta ‘Nosotros los rateros’ (1949).
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Desde entonces, Joaquín Vargas García no paró y hasta llamó la atención de figuras de la talla de Germán Valdés ‘Tin Tan’. Incluso participó junto a él en proyectos como ‘No me defiendas, compadre’ y ‘El rey del barrio’.
¿Cuál fue el amor prohibido de ‘El Borolas’ que lo llevó a la ruina?
Luego de dedicarse por años a la comedia, ‘El Borolas’ adquirió gran renombre. En el ámbito amoroso, se dice que sostuvo una relación con Eva Bejarano.
Sin embargo, también se rumora que el humorista tuvo un romance y hasta vivió con Roberto Cobo (protagonista de la película ‘Los olvidados’).
“Roberto Cobo y Joaquín se involucraron sentimentalmente. Se comenta que la pareja vivía en un departamento en la zona de Tlatelolco de la Ciudad de México. En algún momento quisieron hacer pública su relación, sin embargo, la sociedad de aquel entonces no estaba preparada para ese tipo de noticias. Esa situación los llevó a guardar silencio”, se refirió en el Canal del Cine de Oro Mexicano.
No obstante, ambos terminaron porque un día supuestamente Roberto intentó quitarle dinero a ‘El Borolas’ para comprar estupefacientes. Ambos se enfrascaron en golpes y rompieron, lo que deprimió al comediante.
Luego el cómico entró en un círculo vicioso de perdición, al grado que Mario Moreno ‘Cantinflas’ intervino y lo introdujo a la masonería. De ahí a Joaquín Vargas García le empezó a ir mejor y hasta le llegó su papel de ‘Patiño’ en ‘La criada bien criada’.
Desafortunadamente, para inicios de los años 80 el famoso conoció a un joven bailarín que lo estafó. El muchacho lo introdujo nuevamente al mundo del alcohol y las drogas, hasta que esa situación lo llevó a la muerte por un paro respiratorio el 13 de mayo de 1993.
Fue así como un amor prohibido llevó ruina y miseria a ‘El Borolas’, pues en ese momento el actor del Cine de Oro no podía ser abierto con sus preferencias debido a que se exponía al escarnio público por la falta de apertura en las mentalidades.
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