A una semana de que el gobernador Rubén Rocha Moya rompiera su amistad con el líder moral del PAS Héctor Melesio Cuén Ojeda, esta mañana el mandatario estatal se refirió a la relación del Partido Sinaloense con la Universidad Autónoma de Sinaloa.
Desde la conferencia de prensa semanera, Rocha Moya manifestó tener una hipótesis de que el crecimiento del Partido Sinaloense, se ha basado en el apoyo mutuo que ha recibido de parte de la UAS, pues desde que Héctor Melesio Cuén Ojeda fue rector, señaló, la comunidad Rosalina ha sido violentada y utilizada como parte de una estructura política.
La hipótesis del gobernador, de basa en que la Universidad eroga recursos al PAS, no económicamente pero sí con el acarreo de estudiantes a comités o eventos organizados por el PAS, o, a las mismas votaciones electorales, por ejemplificar.
“Tengo la hipótesis que financieramente la universidad eroga recursos en apoyo al PAS, en la vía de la comprobación de la hipótesis, voy a dar un primer elemento importante. Existen evidencias documentales de funcionarios de alto nivel que se corresponden con el PAS”, expuso Rocha Moya.
Rocha Moya señaló que incluso hay funcionarios de alto nivel adscritos al Partido Sinaloense y que los directores de las facultades de la UAS, tienen que ser militantes del PAS como requisito, incluso dijo, hay algunos que hasta fueron presidentes de los subcomités del instituto político.
Además de eso, Rocha expuso que en los últimos años, maestros, directores, subdirectores y personal trabajador ha tenido que mover a estudiantes a eventos promovidos por el PAS, esto bajo la supuesta “ayuda”, que prometen autoridades de la casa Rosalina.
Un ejemplo de esto, han sido las jornadas médicas que ha realizado el PAS, operadas por personal médico de la UAS.
Por lo anterior, el gobernador hizo un llamado al rector Jesús Madueña Molina, a poner orden en la institución y no permitir que un partido político viole la autonomía de la UAS.
Puntualizó que su gobierno continuará apoyando a la UAS económicamente, pues dijo que es un compromiso que los jóvenes continúen con sus estudios pese a los pleitos políticos que esto ha ocasionado.
Sin embargo se vigilará que los recursos sean utilizados para beneficio de la institución Académica y no de un partido político.