En la historia del rock, hay decisiones que parecen marcar el destino de una banda… Por ejemplo, a principios de los años 70, Black Sabbath estuvo a punto de "vender su alma" a los Rolling Stones, no en el sentido oscuro de sus letras, sino al considerar firmar con el sello discográfico de la legendaria banda británica.
Sin embargo, una serie de eventos extraños los llevó a rechazar el contrato y elegir otro camino, uno que los convertiría en los pioneros del heavy metal.
A principios de la década de 1970, Black Sabbath estaba en pleno ascenso. Con su álbum debut homónimo y Paranoid consolidándose como los pioneros del heavy metal, el futuro de la banda parecía prometedor.
Sin embargo, cuenta una leyenda que antes de convertirse en un ícono del rock, estuvieron a punto de firmar con el sello discográfico de los Rolling Stones, "Rolling Stones Records".
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El rumor
En 1971, Black Sabbath estaba buscando un sello discográfico que les ofreciera mejores condiciones que las que tenían con Vertigo Records, subsidiaria de Philips.
Fue entonces cuando Rolling Stones Records, la disquera que los propios Rolling Stones habían fundado en 1970 para manejar su música de manera más independiente, mostró interés en ficharlos.
Según cuentan, el manager de Patrick Meehan estaba considerando seriamente la oferta, aunque justo cuando todo parecía indicar que el contrato con los Stones se concretaría, una serie de eventos hizo que la banda reconsiderara la decisión.
Una de ellas fue que sintieron “malas vibraciones” y que algo no estaba bien con el trato. Finalmente, tras evaluar la situación, Black Sabbath decidió no firmar con Rolling Stones Records y optó por quedarse con Vertigo Records en el Reino Unido y firmar con Warner Bros en Estados Unidos.
Con Warner Bros., la banda lanzó "Master of Reality" en 1971, un álbum que consolidó su estatus como leyendas del heavy metal y los llevó a alcanzar aún más éxito en Estados Unidos.
El contrato con Vertigo Records y Warner Bros
Lo cierto es que cuando Black Sabbath lanzó su álbum debut en 1970, la banda firmó con Vertigo Records, un sello subsidiario de Philips Records en el Reino Unido, mientras que en Estados Unidos, su música fue distribuida por Warner Bros. Records, una decisión que resultó crucial para su proyección internacional.
Este contrato permitió que el grupo tuviera estabilidad financiera y respaldo en la industria, asegurando la distribución de sus discos en mercados clave.
Al trabajar con Warner Bros, la banda recibió un fuerte impulso en Estados Unidos, lo que ayudó a consolidar su popularidad con álbumes como Paranoid (1970) y Master of Reality (1971).
En la década de 1970, Black Sabbath tuvo problemas con su entonces mánager, Patrick Meehan, quien manejaba las finanzas de la banda y tomó decisiones que no siempre beneficiaban a los músicos.
Estos conflictos llevaron a que el grupo reconsiderara sus acuerdos discográficos y buscará mejores condiciones contractuales en los años siguientes.
Con la salida de Ozzy Osbourne y la llegada de Ronnie James Dio a finales de los 70, la banda cambió de dirección, pues al firmar con Warner Bros lograron seguir con la distribución de sus discos en América.
Ese contrato les permitió también lanzar álbumes como Heaven and Hell (1980), que revitalizó su carrera con una nueva etapa creativa.
Master of Reality (1971): El nacimiento del doom y stoner metal
Black Sabbath llevó su sonido aún más lejos con Master of Reality en 1971, introduciendo afinaciones más bajas en la guitarra y un ritmo más pesado, lo que sentó las bases para el doom metal y el stoner metal.
Con un binomio perfecto de Embryo y Children of the Grave, (esta última considerada una canción profética) Sweet Leaf y Into the Void, demostraron que la banda no sólo podía hacer riffs contundentes, sino también crear atmósferas densas y opresivas.
Este álbum fue clave para definir la estética sonora del metal, con guitarras distorsionadas, baterías profundas y un tono oscuro que inspiraría a innumerables bandas, por lo que su impacto en la evolución del metal.
A lo largo de su historia, la banda británica, liderada por Ozzy Osbourne mantuvo una relación con varias disqueras, pero Warner Bros. y Vertigo Records fueron fundamentales en su ascenso y consolidación.
Si bien hubo muchas decisiones empresariales y conflictos de gestión en su historia, lo cierto es que Black Sabbath supo elegir el camino adecuado para convertirse en una de las bandas más influyentes e importantes de todos los tiempos.