¡Narcoterrorismo!: esto acusaron medios de comunicación y la opinión pública tras la explosión de un coche bomba ocurrida al filo de la tarde del jueves 15 de julio del año 2010 en el Centro Histórico de Ciudad Juárez.
El saldo fue de un médico, dos paramédicos y un civil vestido de policía fallecidos, cuyo cuerpo se hubiera usado como señuelo en la escena; además de al menos 7 heridos, entre los que se encontraban más agentes policiacos y un reportero de televisión.
Cabe destacar que esto ocurrió en los años de álgida violencia en la localidad, sin embargo, la forma en que sucedieron los hechos marcó un antes y un después a cómo la gente percibía la inseguridad en la ciudad.
Muy cerca de ese lugar, en ese momento, unos policías se encontraban levantando evidencia ante el reporte de la ejecución de dos mujeres en la vía pública, y muchos suponen que estas serían también víctimas de aquel ataque, al ser asesinadas para llamar la atención de la policía a fin de que se acercaran al sitio.
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¿Qué pasó con el coche bomba en Ciudad Juárez
En aquel entonces, los homicidios dolosos al estilo del crimen organizado se contabilizaban por decenas diariamente. Periodistas, paramédicos y policías actuaban de inmediato acercándose a estos sitios para hacer su respectivo trabajo.
Mientras circulaban por la avenida 16 de Septiembre, policías refirieron que estaban siendo perseguidos por un auto sospechoso, por lo que se detuvieron y pidieron refuerzos.
De este vehículo descendieron dos hombres, y comenzó un intercambio de disparos y, tras ello, ocurrió una primera explosión por una granada de segmentación.
Sobre la avenida 16 de Septiembre, una de las más antiguas y circuladas de la ciudad, en su cruce con la calle Venezuela, el doctor José Guillermo Ortíz Collazo salía de trabajar, cerca de la zona, y al ver a un hombre, tirado, aparentemente, herido de bala, junto a un auto, tomó su maletín y se acercó a brindar auxilio.
Junto a él lo hicieron dos paramédicos que atendieron el llamado de emergencia.
Cerca del área se encontraba, también, el periodista Luis Hernández Núñez, camarógrafo de XEJTV Canal 5, quien, al notar que algo ocurría, fue el primero en llegar con su equipo, sin siquiera sospechar que sería el único que tendría las imágenes del momento exacto en el que el vehículo explotó, material que le daría la vuelta el mundo.
Luis apenas sobrevivió, aunque con graves heridas en el pie derecho, el abdomen y el pecho; atribuyendo el hecho al haber estado "protegido" por dos unidades policiacas que aminoraron el impacto.
Por su parte, el doctor, quien curiosamente también pertenecía al legendario grupo musical "Los Silvers", murió en el hospital horas después, siendo desde entonces considerado un héroe por la comunidad, que lo recuerda con flores en el lugar de los hechos y en cada aniversario.
Momentos después de que se suscitara la explosión, en el cruce de bulevar Zaragoza y Emiliano Zapata, otra vialidad principal aunque muy lejos del lugar de los hechos, apareció una pinta en una barda en donde el grupo de crimen organizado, "La Línea" se atribuyó el ataque de narcoterrorismo.
Los hechos ocurrieron luego de la detención del líder operativo de este cartel, Jesús Armando Acosta Guerrero, alias "El 35". Se descubrió que el hombre, que había sido usado como el señuelo, no era policía, y que la explosión hubiera sido detonada a distancia a través de un teléfono celular, es decir, que todo había sido un ataque en represalia.
Las casas y negocios aledaños terminaron con ventanas rotas, al igual que los vehículos. Las propias calles y banquetas quedaron rotas y había piezas metálicas por doquier.
Muchas personas, asustadas, salieron para averiguar qué ocurría y después correr. Fueron momentos de pánico en el que ni la misma policía sabía con exactitud qué estaba pasando, dejando una marca indeleble en la historia negra de Ciudad Juárez.
¿Quién fue detenido por el coche bomba en Ciudad Juárez?
El 13 de agosto de 2010 cinco personas fueron presentadas como detenidas, acusándolos de responsables del acto considerado como narcoterrorismo.
Gustavo Martínez Rentería, de 24 años y su hermano, Victor Manuel de apenas 19; junto con Ricardo Lomelí de 28 años, Noé Fuentes Chavira, de 29; y Rogelio Amaya Martínez, de 27.
Todos fueron detenidos mientras se encontraban reunidos, bebiendo en la calle, y trasladados de inmediato a la Ciudad de México para presentarlos ante el Ministerio Público.
Ante los medios fueron exhibidos como personas con nexos con el narcotráfico, pero sus familias denunciaron que fueron torturados y obligados a culparse de lo que ocurrió a lo que siguieron investigaciones..
Finalmente, años después, el 7 de marzo de 2014, todos ellos fueron liberados.
También, el 21 de octubre del 2010, la Secretaría de Seguridad Pública presentó otros 14 detenidos, entre estos, Fernando Contreras Meraz, acusado colocar y hacer explotar el coche bomba
Luego, el 29 de julio de 2011 se presentó a José Antonio Acosta Hernández, supuesto líder de La Línea y de más de mil 500 asesinatos, entre ellos, los ocurridos en la llamada "masacre de Villas de Salvárcar", así como de la explosión del coche bomba.
Este último fue extraditado a Estados Unidos y sentenciado el siguiente año a 10 cadenas perpetuas, pero entre los crímenes por los que se le condenó, no figuró el coche bomba.