Desde hace más de 80 años una estrella muy especial alumbra las noches de Ciudad Juárez y El Paso, cómo un icono de esperanza.
Desde lo alto sobre la Montaña Franklin, del lado estadounidense de esta frontera, su presencia cobra mayor significado en fiestas decembrinas, toda vez que su intención primaria era la de celebrar la temporada.
No obstante, debido a la belleza que irradia con sus más de 300 luces, y el tamaño de su estructura, la estrella se ha convertido en un referente geográfico de la región.
Cuenta con más de 139 metros de largo y con 84 metros de ancho, lo que hace posible ser vista a más de 3 kilómetros de distancia.
Su fulgor no respeta la frontera física entre ambas ciudades, y desde hace décadas ilumina no sólo la navidad, sino todas las noches de quien se asoma al cielo en su dirección, tal cual si fuera una más del firmamento.
¿Cuándo se prendió por primera vez la estrella de la Montaña Franklin?
La estructura fue diseñada y construida por la empresa El Paso Electric Company en el año de 1940 y al principio, la misma contemplaba que fuera una ornamenta de navidad.
Ese mismo año se encendió por primera vez, según refieren diversos sitios en la internet, en ese momento no eran tan grande, medía apenas unos 140 metros de alto, por 84 de ancho.
Sin embargo, narradores locales dicen que unos años después fue dañada en medio de una tormenta, y al ser restaurada se decidió aumentar su tamaño.
¿Qué significa la estrella de la Montaña Franklin?
La estrella de la Montaña Franklin ha pasado por diversos momentos a lo largo de estas décadas.
Uno de los más recientes fue el homenaje que realizó tras los hechos ocurridos el 3 de agosto del año 2019, cuando un hombre motivado por un discurso de odio, disparó contra varias personas dentro de una tienda Walmart de la ciudad.
En esa ocasión 23 personas perdieron la vida, la mayoría eran latinas, autoridades estadounidenses decidieron apagar por primera vez en mucho tiempo la estrella y encenderla 23 veces en señal de respeto a sus memorias.
Pero esta no fue la primera vez que su luz tuvo una relación con los hechos citadinos más allá de la navidad,
En al menos dos ocasiones su encendido tuvo la intención de consolar e inspirar esperanza a la comunidad, debido a la guerra.
La primera vez fue en 1979, cuando se mantuvo encendida durante 444 noches continuas, en señal de solidaridad para un grupo de rehenes de aquel país.
Estos estuvieron cautivos desde el 4 de noviembre de 1979 y hasta el 20 de enero de 1981.
Luego, durante la Guerra del Golfo Pérsico, nuevamente estuvo en prendida durante 263 días, desde Navidad de 1990 al 21 de agosto de 1991.
Es por ello que muchas personas recuerdan la estrella como un homenaje a los soldados caídos en la guerra.
No obstante, en 1993, la Cámara de Comercio de El Paso, realizó la propuesta de que su presencia encendida estuviera cada día al caer el sol.
Y fue un 21 de abril, cuando se encendió para no volverse a apagar jamás. Su funcionamiento sigue a cargo de El Paso Electric Company.
Lo más significativo, es los diversos significados que la población fronteriza le atribuye, pues incluso, su brillo se le ha atribuido en la voz popular a noches de graduación de la Universidad de Texas en el Paso.