El fiscal general del Estado, Roberto Fierro Duarte dijo que los habitantes del municipio de Urique y comunidades aledañas han solicitado a las autoridades policiales que no se retiren de la zona, ya que con ellos ahí se sienten más seguros.
Explicó que, a un mes del asesinato de los dos sacerdotes jesuitas, así como de un guía de turistas y un jugador de béisbol, se han tomado acciones inmediatas para detener al principal sospechoso, un líder delincuencial apodado como ‘El Chueco’.
Indicó que como resultado de las acciones que han tomado las autoridades en la región, recientemente fueron detenidas y vinculadas dos personas que estuvieron involucradas con la muerte de Paul, un joven beisbolista quien fuera asesinado también presuntamente por dicho líder delincuencial.