Como si se tratara de una historia de Halloween, desde hace un año, un macabro contenedor habita en la Oficina de Objetos Extraviados del Metro de la Ciudad de México, pues se trata de la urna que aparentemente resguarda las cenizas de un hombre.
De acuerdo con el Sistema de Transporte Colectivo (STC), la urna mortuoria posee una placa de identificación con el nombre de Luis ‘N’, la cual fue recibida por autoridades capitalinas en la estación Instituto del Petróleo de la Línea 6.
No es la primera vez que el Metro de la CDMX resguarda una urna mortuoria en la Oficina de Objetos Extraviados. En junio de 2015, un matrimonio perdió el contenedor que resguardaba los restos de su bebé mientras viajaba en la Línea 3.
“En diciembre de 2016, se enteraron que el Metro tenía una Oficina de Objetos Extraviados y que ahí permanecía la pequeña caja con las cenizas de su hija, un biberón y un muñeco de peluche. Acudieron en vísperas de la Navidad y les fue entregada luego de comprobar la propiedad, con el acta de defunción y el documento de cremación”, informaron por medio de un comunicado.
También en 2015, pero en octubre, otra urna mortuoria llegó a las autoridades del Metro procedente de la estación Panteones de la Línea 2. El contenedor traía los restos de Gustavo, un joven de 30 años. Dos años después, su familia la recuperó.
Desde pasaportes hasta bicicletas: esto olvidó la gente en el Metro de CDMX en 2024
A lo largo de 2024, la Oficina de Objetos Extraviados del Metro capitalino recibió dos mil 548 artículos entre ellos credenciales, equipos celulares, mochilas, maletas, bastones, carriolas así como documentación personal, de los cuales 140 fueron devueltos a sus dueños previa comprobación de su propiedad.
También fueron entregadas al Instituto Nacional Electoral (INE) 400 credenciales y 72 del Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (INAPAM), que son del último trimestre de 2023 y los primeros 6 meses de 2024.
Mientras que en la bodega del Metro de la CDMX aún se resguardan 788 objetos, como son calzado, mochilas, identificaciones, documentación personal y celulares, que aún no han sido reclamados por sus dueños.