Un operativo para el cierre de aserraderos en el municipio de Huitzilac, Morelos, derivó en una serie de protestas violentas por parte de las personas dedicadas a la tala clandestina e incluso quemaron vehículos de la Comisión Nacional Forestal (Conafor). Pero ¿quiénes son estos grupos y por qué efectúan una actividad ilegal? Te contamos.
Tanto las autoridades de Morelos como la de la Ciudad de México desplegaron operativos de seguridad, con la finalidad de evitar que las acciones violentas aumentaran; no hubo personas lesionadas. El principal objetivo del operativo es evitar la tala clandestina que se da en los bosques que existentes en los límites de Morelos, Estado de México y CDMX.
¿Quiénes son los talamontes que dejan 'pelones' los bosques de la CDMX y Morelos?
A lo largo de las sierra del Chichinauhtzin, que se ubica en los límites de la Ciudad de México con Morelos y el Estado de México, operan grupos clandestino dedicados a la tala, quienes no cuentan con un permiso de la Comisión Nacional Forestal (Conafor). En 2021, la entonces jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum, dijo que algunas de estas personas actúan por cuenta propia y otras están ligadas a grupos criminales.
Apenas en junio de 2023 y tras un operativo en el pueblo Lomas Tepecamatl, ubicado en Tlalpan, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) aseguró: "se tiene conocimiento que detrás de este ilícito posiblemente opera la delincuencia organizada"; dichos grupos también recurrirían a la intimidación y secuestro. En tanto que la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (Corenadr) estima que hay al menos cinco grupos dedicados a estos ilícitos.
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En noviembre de 2022, brigadistas de San Miguel Topilejo anunciaron que fueron atacados con armas largas por personas dedicadas a la tala clandestina, quienes iban a bordo de una camioneta; al igual que con las células del narcotráfico, estos grupos también contratan a 'halcones' (vigilantes), quienes tienen la labor de ponerlos sobre aviso en caso de la presencia de autoridades.
La organización Bienes Comunales de San Andrés Topilejo afirmó que han hecho al menos 200 denuncias; estas organizaciones junto a los comisariados ejidales se han unido a los esfuerzos de los gobiernos locales y federales para frenar la tala clandestina. Se estima que estos grupos derriban un promedio de 100 árboles al día.
El Gran Bosque de Agua, una zona boscosa en los límites de Morelos, Edomex y CDMX, es considerada como una de las 108 regiones críticas para la tala clandestina, de acuerdo con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa). Otra de estas regiones es el Triángulo Dorado, entre Chihuahua, Durango y Sinaloa, zona conocida por ser hogar de varios narcos.
¿Por qué la actividad que realizan los talamontes está al margen de la ley?
Aparte de que no cuentan con permiso alguno, los grupos dedicados a la tala cladestina operan en el Ajusco, que se trata de un Área Natural Protegida (ANP), delito que es penado con hasta 20 años de prisión, de acuerdo con una serie de reformas hechas Código Penal Federal en abril de 2023.
La tala ilegal en México se castiga con hasta 16 años de prisión; esta pena también aplica para todas aquellas personas que transporten, comercien, distribuyan, vendan, almacene y resguarde materias primas forestales o productos forestables maderales de manera ilegal. Se trata de un ilícito contra el ambiente y la gestión ambiental.
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC) señala que la tala clandestina también ocasiona desplazamiento de poblaciones originarias, pérdida de biodiversidad, deforestación de los bosques que conduce a la desertificación y a la escasez de agua. La Profepa pone a disposición el número 00 800 776 3372 para realizar denuncias.