Esta vez no fue Oaxaca, Guerrero ni Michoacán el epicentro de dos sismos de baja magnitud que se percibieron en la Ciudad de México en menos de 12 horas, sino fue nada más y nada menos que la alcaldía Magdalena Contreras, por lo que surge la duda ¿ahora serán más frecuentes los microsismos en la capital del país? Esto dice la ciencia.
A las 22:20 horas del miércoles 10 de mayo, se registró un microsismo de magnitud 3.0 en el noreste de la alcaldía Magdalena Contreras, que tuvo al menos nueve réplicas, según reportes del Servicio Sismológico Nacional (SSN).
El mismo punto fue el epicentro de un segundo microsismo de magnitud 2.2, el cual ocurrió a las 09:05 horas de este jueves, informó el SSN.
Aunque estos dos sismos se percibieron fuertes en algunos puntos de la Ciudad de México, la alerta sísmica no se activó debido a que su epicentro fue en la misma capital del país, explicó el Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano (C5).
Por esta razón hay sismos en la CDMX
Luis Quintanar Robles, investigador del Departamento de Sismología del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), explicó en 2019 que los miscrosismos en la capital del país se deben a una falla geológica activa en el subsuelo del Valle de México.
El especialista detalló que el Valle de México lo atraviesan una serie de fallas, cuya longitud no es tan grande como las que se encuentran en las costas del Pacífico.
Asimismo, indicó que las pequeñas fallas del subsuelo del Valle de México se activan con las ondas de los sismos de gran magnitud que se registran en las costas del Pacífico, y esto desencadena microsismos con epicentros en la CDMX.
¿Ahora son más frecuentes y fuertes los sismos de la CDMX?
Quintanar Robles expuso que las pequeñas fallas geológicas del Valle de México existen desde hace miles de años, por lo que siempre se han registrado microsismos en esta zona.
Afirmó que ahora no hay un aumento de microsismos, sino que son más perceptibles y no porque sean de más alta magnitud.
Explicó que hace 20 o 40 años, era menor o nula la población que los percibía, por lo que pasaban desapercibidos los microsismos, sin embargo, ahora está más poblado todo el Valle de México y entonces son más las personas que los perciben, por muy leves que sean.
Además, el Servicio Sismológico Nacional pasó de tener una a 30 estaciones sismológicas de banda ancha en el Valle de México, que le permiten detectar casi todos los movimientos telúricos y reportarlos.
Señaló que ahora también hay estaciones acelerográficas del Centro Nacional de Prevención de Desastres, el Centro de Instrumentación y Registro Sísmico, que maneja el Sistema de Alerta Sísmica Mexicano (Sasmex) y el Instituto de Ingeniería.
Por último, el especialista explicó que los microsismos no se perciben en todo el Valle de México debido a que son superficiales y sólo alcanzan los 5 o 10 kilómetros de profundidad, a diferencia de los que ocurren en el Pacífico, que llegan a alcanzar hasta los 50 kilómetros._Con información de Gaceta UNAM.