Tras más de un año cerrada y luego de una inversión de 37 mil millones de pesos, el Gobierno de la Ciudad de México reabrió el tramo de la Línea 1 que va de Pantitlán a Isabel La Católica; la rehabilitación se dio en todos los espacios de las estaciones, incluyendo las vías y los trenes, conoce cuáles fueron los principales cambios.
Guillermo Calderón, director general del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, enumeró todos los cambios que se hicieron en lo que se denomina como la Nueva Línea 1. Para empezar, en la zona de vías se realizó la sustitución de 90 mil toneladas de balasto, además de que se sustituyeron tuberías y registros, aunado a que se equiparon 69 cárcamos (sistemas de recolección de agua).
En la zona de vías también se colocaron 44 mil metros de rieles e igual número de pistas de rodamiento y de barras guía. Hay 55 mil nuevos durmientes, pero en esta ocasión ya no son de madera, sino de concreto; aparte de que se pusieron 20 mil aisladores para las barra guía y 15 aparatos de cambio de vía.
Hasta en 54 mil metros cuadrados se echó impermeabilizante para evitar filtraciones de agua, mientras que para el cableado de baja tensión, tracción, señalización y comunicaciones se pusieron hasta 150 kilómetros de charolas; todo el cableado equivale a mil 800 kilómetros. La nueva Línea 1 ya cuenta con una red de fibra óptica.
De acuerdo con información compartida por el STC Metro, las estaciones Pantitlán, Zaragoza, Gómez Farías, San Lázaro, Candelaria, Pino Suárez e Isabel La Católica fueron remodeladas en su totalidad, aparte de que se instalaron 2 mil 500 lámparas con tecnología LED. Hay 10 nuevos elevadores destinados a personas con discapacidad y personas adultas mayores.
Dentro de las estaciones de la Nueva Línea 1 se modernizaron los torniquetes, validadores y puertas de acceso; todas las taquillas ya cuentan con dispositivos para venta y recarga de tarjetas. En todas las estaciones que reabrieron sólo se puede acceder con la tarjeta de Movilidad Integrada (MI) y ya no con boletos de banda magnética.
La remodelación de la Nueva Línea 1 también fue de los trenes: en total serán 29, uno se construyó por completo en China, mientras que los 28 restantes serán construidos tanto en el país asiático como en una planta de Querétaro. Constarán de nueve carros con capacidad para 2 mil 200 pasajeros y alcanzan una velocidad máxima de 80 kilómetros por hora.
La Nueva Línea 1 también cuenta con un sistema de pilotaje automático, mismo que recibió la certificación internacional ISA y que otorga la empresa suiza SGS. Por ahora, 10 trenes operarán en el tramo rehabilitado mientras arranca la remodelación de tramo que va de Observatorio a Balderas.