Una vez más el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) y el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) acapararon los reflectores, luego de que en éste último se registró un incidente el sábado por la noche donde un avión aterrizó en una pista ocupada.
Lo anterior ha llevado a que capitalinos y pasajeros se pregunten si aquel incidente ha sido el único que se ha presentado en la Ciudad de México, la respuesta es no. Y es que ha habido varios accidentes que se han presentado tanto en el AICM, que partieron desde dicho lugar, así como en otras partes de la capital del país.
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Accidentes aéreos en la CDMX
Vuelo 2605
Uno de los más recordados es el vuelo 2605 de Westerns Airlines, que salió de Los Ángeles con destino a la Ciudad de México, el 31 de octubre de 1979.
La aeronave transportaba a 89 personas, 76 eran pasajeros y 13 tripulantes, de los cuales, perdieron la vida 72, mientras que 15 resultaron gravemente heridas.
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El accidente se debe a que en cuatro ocasiones la tripulación fue advertida que debían aterrizar en la pista 23 derecha, pero no entendieron el mensaje e incorrectamente aterrizaron en la 23 izquierda, lugar donde se encontraban realizando labores de mantenimiento.
Pese a que el capitán intentó reaccionar y elevar la aeronave, fue demasiado tarde, ya que terminó por impactar a un camión de volteo, lo que ocasionó la inestabilidad del avión, que terminó por estrellarse con otras construcciones del AICM.
Vuelo de Juan Camilo Mouriño
Otro de los accidentes ocurridos en la Ciudad de México fue el que cobró la vida del entonces secretario de Gobernación durante la administración de Felipe Calderón, Juan Camilo Mouriño.
El 4 de noviembre de 2008, el avión Learjet 45 en el que viajaba el exfuncionario, desde San Luis Potosí a la capital del país, se desplomó cerca de la intersección de Periférico y Paseo de la Reforma.
Vuelo de Francisco Blake Mora
Tan sólo tres años después del accidente de Camilo Mouriño, nuevamente otro funcionario se vio involucrado en un accidente aéreo, en esta ocasión se trató de Francisco Blake Mora, también secretario de gobernación.
El funcionario perdió la vida el 11 de noviembre de 2011, luego de que el avión Eurocopter AS332 se estrellara en un paraje rural del municipio de Chalco, Estado de México, en las cercanías a Santa Catarina Ayozingo y la Ciudad de México.
En el accidente también perdieron la vida el director general de Comunicación Social, José Alfredo García Medina; la secretaria técnica de la oficina de Blake, Diana Sánchez; el teniente Mayor René de León Sapién; los tenientes de la Fuerza Aérea; Felipe Cortés y Pedro Ramón Escobar, así como el sargento Jorge Luis Juárez Gómez.
Vuelo 801
El 21 de septiembre de 1969, un Boeing 727-64 de Mexicana de Aviación, procedente de Chicago, Illinois, con destino a la Ciudad de México, se estrelló a pocos kilómetros antes de llegar.
El avión se estrelló cerca de la vía del tren a Texcoco, accidente en el que perdieron la vida cinco integrantes de la tripulación, y 22 de los 111 pasajeros.
Choque en desfile aéreo
El 16 de septiembre de 1995 durante el tradicional desfile militar, cuatro aviones chocaron al poniente de la Ciudad de México cuando se disponían a realizar un segundo pase sobre el centro de la capital.
Dicho accidente fue protagonizado por tres jets T-33 y un F-5E, los cuales colisionaron en el aire, ocasionando la muerte de seis pilotos, el único sobreviviente fue el teniente Gerardo Ceballos Peraza, quien antes del impacto recibió la orden de su comandante de accionar la palanca de expulsión.
Tras lo ocurrido, se suspendió por 12 años la participación de aviones durante el desfile, siendo hasta 2007, durante la administración de Felipe Calderón cuando regresaron a los aires para las conmemoraciones del 16 de septiembre.
Vuelo 940
Finalmente uno de los accidentes más recordados y que ha sido calificado como uno de los más graves en la historia es el ocurrido el 31 de marzo de 1986, se trata del vuelo 940 de Mexicana de Aviación, que si bien no ocurrió en la Ciudad de México, la capital del país fue su punto de salida con destino a Los Ángeles, con escala en Puerto Vallarta y Mazatlán.
El siniestro fue ocasionado por el sobrecalentamiento del conjunto de frenos derivado de la explosión del neumático del tren de aterrizaje.
Tras despegar del AICM, el neumático del tren de aterrizaje principal explotó, lo que orilló al piloto a intentar regresar a la Ciudad de México de emergencia; sin embargo, la aeronave se terminó por estrellar en la montaña El Carbón, cerca de Maravatío, Michoacán, lo que provocó que los 167 pasajeros y los integrantes de la tripulación perdieran la vida.