El caso de Juan David, un pequeño originario de Irapuato que con tan sólo 11 años de edad fue violentado y desaparecido por su padrastro MIGUEL ÁNGEL “N”, quien era policía municipal de Irapuato avanza, pues la fiscalía general del estado logró su condena por 51 años por el delito de violencia intrafamiliar y desaparición forzada.
El acusado es culpable por los delitos de desaparición cometida por particulares, delito por el que fue sentenciado a 45 años de cárcel, y a 6 años más por el delito de violencia familiar, en agravio de Juan David.
En la carpeta de investigación integrada a partir de la desaparición del pequeño en la colonia Urbi Villas del Rey, la Fiscalía acreditó que el padrastro del niño se encontraba en el domicilio el 13 de mayo de 2022, y entre las 00:00 y las 01:00 horas entró a la habitación del Niño y lo sacó del domicilio en contra de su voluntad, con el argumento de que lo llevaría con su padre biológico.
Sin embargo, horas después, el expolicía regresó al domicilio y la madre de Juan David le preguntó por su hijo, a lo que respondió que, al ir caminando juntos, el niño se echó a correr y ya no supo nada de él. La madre insistió en saber el paradero de su hijo, pero MIGUEL ÁNGEL “N” decidió ya no decir nada. Ese fue el último día que se supo del niño.
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Al investigar, la Fiscalía pudo establecer que el hoy sentenciado ejerció violencia física y verbal en contra de la víctima; entre las lesiones que le infligió se encuentran una herida en la cabeza y en el área de la boca.
A pesar de que, en el proceso de búsqueda del pequeño, los vecinos de Irapuato rastrearon y procesaron diversos lugares y que Peritos arqueólogos revisaron con georradar diversas áreas que pudieran tener relación con los hechos, hasta el día de hoy el niño no ha sido encontrado y su padrastro se ha rehusado a decir su paradero.