La información viene de un reporte que lanzó Reuters, en donde explican detalladamente la forma en la que algunas marcas de autos chinos están elevando los costos de sus productos en el extranjero.
Y es que por la propia estrategia que maneja el gobierno chino con las marcas de su nacionalidad, conseguir estos productos es extremadamente barato para los chinos. Para darnos una idea, el BYD King DM-i que se acaba de presentar en México tiene precios en China que parten desde los 79,800 yuanes, el equivalente a unos $189,000 pesos mexicanos.
En México, la variante que tenemos del King no es la más accesible y su precio en pesos es de $499,800, un equivalente en China debería estar rondando entre los $250,000 a $300,000 pesos.
Por ese nivel de competencia dentro de casa, es por qué estas marcas están ofreciendo sus productos en algunos casos casi hasta en el triple de precio que tendrían en China. Otro ejemplo en otra moneda es el BYD Yuan Plus, que en Europa, acorde a su versión; es entre 81% y 174% más caro de lo que cuesta en China. En Alemania un BYD Dolphin cuesta $37,439 euros, mientras que en china su valor equivaldría a $16,524 euros.
Más accesibles que sus competidores
El colocar estos precios simplemente obedece a una forma de compensar los márgenes tan bajos que tienen en su propio mercado debido a la fuerte competencia que hay entre empresas, pues prácticamente todas al tener el apoyo del gobierno, pueden manejar esos precios tan bajos en su país.
Lo impresionante es que estos modelos a pesar de ser hasta tres veces más caros que en su país de origen, en Europa, América Latina y otras regiones, terminan siendo aún más accesibles que la competencia tradicional.
En México podemos notar como la MG eHS, una compacta híbrida enchufable, es hasta más accesible que rivales del segmento con trenes motrices híbridos tradicionales. De igual forma, un BYD Seal es considerablemente más accesible que un Tesla Model 3, BMW i4 y compañía.
Hasta Volvo —que está controlada por Geely—, estará por ofrecer en México su EX30 fabricada en China a un precio que hará dar batalla a marcas que no compiten en el segmento premium.